Los datos revelan que hasta el final de 2008 la evolución del desempleo en las áreas rurales fue positivo.
El desempleo en las zonas rurales de la Unión
Europea (UE) ha subido hasta el 9,1 %, con lo que ha alcanzado los
niveles de 2006, según el documento de trabajo de la Comisión Europea
sobre desempleo, crecimiento e innovación en las área rurales.
El documento revela que hasta el
final de 2008 la evolución del desempleo en las áreas rurales fue
positivo y que en 2009, con el inicio del impacto de la crisis
económica, las tasas de paro se resintieron más en las zonas urbanas.
Sin embargo, a partir de este año la tasa de paro comenzó a crecer y
ha alcanzado datos de 2006, una cifra que es "bastante preocupante",
según se desprende del documento.
Además, el paro femenino se
mantiene generalmente más alto y en los últimos años "no ha habido
progresos" en la equiparación de las tasas de empleo de ambos géneros.
En el estudio, se resalta igualmente "la caída significativa" del
número de trabajos en agricultura y que el numero de jóvenes en la
agricultura están bajando en la UE, donde sigue predominando el modelo
de familias que trabajan en el campo a tiempo parcial.
Los
servicios son el principal vehículo de crecimiento en las regiones
rurales, señala el documento, aunque todavía queda lejos de las tasas de
las regiones urbanas.
En líneas generales, los sectores más
importantes en las áreas rurales son la agricultura, el turismo, el área
forestal y la pesca, según el informe.
Le siguen la
construcción y la industria y, en los últimos años, comienzan a ser
"significativos" sectores como las plantas de energía renovable y
actividades relacionadas con el medioambiente.
Incluye como
aspectos que pueden ayudar al crecimiento de las zonas rurales, la
calidad ambiental, la estructura diversificada de la economía y la
calidad de vida de la que gozan sus habitantes.
Como frenos a
este desarrollo, se destacan la falta de infraestructuras, el acceso a
la banda ancha o los bajos niveles de conocimiento y de emprendedores.
En cuanto a la demografía, el documento indica que el crecimiento de
la población en las zonas rurales es "muy limitado" y que en los
colectivos de mujeres y jóvenes ha empeorado.
Como datos
generales, el informe recuerda que el 57 % del territorio de la UE es
rural y que el 24 % de la población vive en estos territorios.
En el documento también se han estudiado algunos casos de iniciativas
rurales y, tras su análisis, se revela que los proyectos más exitosos
son los que integran a varios sectores y comprenden el concepto de
desarrollo local.
Algunas de las consideraciones del documento
son hacer hincapié en los proyectos que favorezcan el empleo de jóvenes
y mujeres al tiempo que se solicitan más infraestructuras y esfuerzos
para estimular la diversificación y los servicios en las zonas rurales.
"Es crucial mantener el apoyo a las áreas rurales" para eliminar las
diferencias con las zonas urbanas, subraya el documento, para que
solicita más efectividad en los actuales mecanismos de coordinación.
Para facilitar el proceso, concluye, la Comisión Europea en su
propuesta de reforma de la Política Agraria Común (PAC) ha introducido
nuevos elementos como innovación, diversificación y coordinación
pública-privada.