Los precios eran excepcionalmente bajos, por lo que se evita una situación "explosiva" en el olivar, al menos de momento.
El anuncio de activación del almacenamiento
privado del aceite de oliva, que permitirá retirar hasta 100.000
toneladas del mercado, relaja los ánimos, anticipa una recuperación de
los precios en origen, excepcionalmente bajos, y evita una situación
"explosiva" en el olivar, al menos de momento.
"Los precios se
mantienen, aunque con tendencia al alza a consecuencia del anuncio de
la activación del sistema de almacenamiento privado para las categorías
virgen extra y virgen", han apuntado desde la lonja del aceite de Asaja
Córdoba, que celebró su tradicional sesión de los viernes.
"Se espera el mecanismo sirva de ayuda a equilibrar oferta y demanda y con ello los precios", puntualiza. Ha descrito precios de entre 1.743 y 1.863 euros por tonelada; de
entre 1.593 y 1.653 euros para el virgen botella de 1º y de 1.503 a
1.563 euros para el lampante para refino hasta 1º.
Se
deprecia, por su parte, el aceite de orujo crudo en la provincia, que
pasa de 751 a 720 euros/t y se mantiene el aceite de girasol (980
euros/t) en las refinerías cordobesas.
También el mercado de
futuros parece moverse al alza tras el anuncio de la activación del
almacenamiento, tendencia que tradicionalmente anticipa el
comportamiento que seguirán los precios de contados en las próximas
semanas.
Concretamente, se han realizado en el Mercado de
Futuros del Aceite de Oliva (MFAO) unos 350 contratos de futuros entre
el 2 y el 8 de febrero de 2012, con cotizaciones que han oscilado entre
los 1.610 y los 1.640 euros por tonelada.
Más movimiento esta
semana entre los operadores respecto a la anterior, cuando culminaron
150 contratos de futuros a una horquilla de precios de entre 1.560 y
1.640 euros/tonelada.
El Sistema de Información de Precios
POOLred, el indicador más ampliamente aceptado como referente de las
cotizaciones en el mercado de contados, recoge entre el 4 y el 10 de
febrero una subida para los vírgenes extra del 0,44 %, hasta 1,82
euros/kg y del 1,96 % para los vírgenes (hasta 1,67 euros).
Pero también se mueven al alza los lampantes (+1,28 %, hasta 1,58 euros)
y los aceites de menor inferior (+2,60 %, hasta 1,42 euros/kg).
Sin embargo todas las categorías acumulan retrocesos respecto a las
mismas fechas de 2011, con devaluaciones de entre el 6,35 y el 7,63 %,
según POOLred.
Este Sistema recoge, no obstante, pocas
operaciones esta semana (sólo 50) con un volumen de compraventas entre
almazaras y entidades comercializadoras de 4.919,65 toneladas, la mitad
que una semana antes.
Por su parte, el último informe semanal
de coyuntura del Ministerio de Agricultura (con datos del 30 de enero al
5 de febrero) apunta ligeras variaciones en el precio del aceite de
oliva, aunque con ligeras subidas del 0,06 % para los vírgenes y de 0,11
% para los lampantes
Caen, sin embargo, el aceite de orujo crudo (-0,41 %) y el refinado de girasol (-0,43 %), según estos datos.
Las mayores variaciones de cotizaciones en los mercados
representativos se producen en la categoría de aceite de oliva virgen
extra en ese período, con variaciones de 7,50 euros/100 kg en Badajoz, y
entre 1 y 2,50 euros en Málaga, Sevilla y Córdoba.
Respecto a
la probable evolución de los precios en el futuro, el sector confía en
que no haya problemas de excedentes que derrumben las cotizaciones en el
futuro, gracias a la retirada de 100.000 toneladas en España que no
tendrán que volver al mercado hasta dentro de 150 días -nada más y nada
menos que cinco meses- por lo que todo apunta que los valores seguirán
su tendencia alcista.
Los repuntes podrían ser más amplios si
el mercado empieza a descontar más adelante una pérdida de cosecha
durante la próxima campaña 2012-2013 (la actual está prácticamente
terminada) por la sequía o por eventuales efectos de las heladas sobre
los olivos, lo que motivará que industriales y envasadores urjan compras
para asegurarse abastecimiento futuro a valores más o menos asequibles.
En ese caso, la ley de la oferta y la demanda actuará y los bajos
precios actuales, por debajo de los costes de producción para la mayoría
de los productores olivareros, remontarían, aunque si lo hacen
demasiado podría perjudicar las ventas y lastrar las exportaciones, que
actualmente se mueven en niveles históricos.
En el equilibrio está la virtud. De momento el pesimismo del olivar deja paso a un moderado optimismo y
si la tendencia alcista se confirma, los profesionales pueden pasar del
"rojo" de las pérdidas al "verde" del beneficio.