Este Camino, situado en el suroeste de la provincia de Córdoba, comprende el tramo entre el límite de los términos municipales de Moriles y Lucena y la antigua estación de Campo Real, (T.M. de Puente Genil).
El Ministerio de Medio Ambiente y
Medio Rural y Marino, a través de la Dirección General de Desarrollo
Sostenible del Medio Rural ha puesto en servicio, en el suroeste de la
provincia de Córdoba, la prolongación del Camino Natural Vía Verde del
Aceite en el tramo comprendido entre el límite de los términos
municipales de Moriles y Lucena y la antigua estación de Campo Real
(T.M. de Puente Genil).
La
obra, promovida por la Diputación de Córdoba, ha sido financiada y
dirigida por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino
dentro del Programa de Caminos Naturales, con una inversión de 1.193.628
euros.
El Camino Natural
tiene una longitud total de 7,9 km y ofrece continuidad a las vías
verdes del Aceite y Subbética, parte jiennense la primera y cordobesa la
segunda. El conjunto extiende su trazado sobre los 175,8 km de la
desaparecida línea férrea Puente Genil-Linares (1881-1985), que tanto
hizo por el desarrollo e industrialización de las poblaciones que
cruzaba, y si bien surgió con vocación minera, fue el aceite de oliva el
principal producto al que dio salida, recibiendo por ello el popular
nombre de Tren del Aceite.
Las
principales actuaciones realizadas son el acondicionamiento del
terreno, con desbroce, limpieza y eliminación de residuos en diversos
tramos; movimientos de tierras: escarificado y compactación de la
plataforma existente. En el caso de existencia de balasto, el proceso
mencionado se ha sustituido por saneo, recebo, nivelación y
compactación del mismo. En cuanto a infraestructuras, con el fin de
salvar la carretera A-318 se ha instalado una pasarela metálica peatonal
de 25 metros de luz libre sobre la misma.
También
se han .ejecutado drenajes, entre los que se incluyen cunetas de tierra
y hormigón, caños y badenes de hormigón. En cuanto a los firmes y
pavimentos, una vez ejecutadas las obras de drenaje y acondicionamiento
de la plataforma, se ha procedido a la ejecución de los nuevos paquetes
de firmes y se han dispuesto dos bandas diferenciadas; una franja de
rodadura para ciclistas, terminada con un doble tratamiento superficial
(2,5 m) y una franja para paseo a pie, terminada con una capa de finos
de 1,0 m de ancho. Estos trabajos se han realizado en toda la longitud
del camino.
Se ha dispuesto
balaustrada de madera en general donde existen desniveles de diversa
consideración para salvaguardar la integridad de los usuarios. También
se han provisto bolardos extraíbles con el fin de cerrar el tráfico a
vehículos no autorizados, se han realizado plantaciones en aquellos
tramos donde se ha considerado adecuado por criterios de protección de
suelo, necesidades de sombra y delimitación de recintos y se ha colocado
un panel interpretativo a lo largo de todo el trazado del Camino
Natural, así como señales informativas de orientación y precaución, y
mobiliario consistente en bancos, mesas y aparcabicis distribuidos en el
área de descanso ejecutada, de acuerdo a los criterios del Manual de
Señalización de Caminos Naturales.
Este
nuevo recorrido integra múltiples usos de carácter social (senderista,
peatonal, ciclista, de contemplación, etc.) al mismo tiempo que se
potencian valores paisajísticos, históricos, culturares y recreativos de
la zona por la que transcurre, sin que éstas actuaciones ejerzan una
acción negativa sobre el medio en que se adentran, y de forma que se
desarrollen en correcta consonancia con el resto de actividades humanas
que se desarrollan en el entorno. El acceso se realiza desde los núcleos
de población principales, facilitando su incorporación al senderista.
La
obra cumple con los criterios del Programa de Caminos Naturales
desarrollado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y
se une a los más de seis mil seiscientos kilómetros existentes de
Caminos Naturales construidos desde el año 1993, contribuyendo a
diversificar la actividad económica de la región potenciando la oferta
turística; conservando los espacios naturales a través de la educación
medioambiental, preservando los recursos de la zona de influencia del
Camino Natural y favoreciendo la conservación del patrimonio cultural y
tradicional, dotando de nuevas funcionalidades a infraestructuras
abandonadas, permitiendo así el cuidado y transmisión del legado
cultural de la zona.