Según el sindicato UGT, más del 70 por ciento de los trabajadores españoles que van a la vendimia francesa son andaluces.
Unos doscientos jornaleros se han
concentrado en Bailén (Jaén), nudo de comunicaciones entre la A-4 y
la A-44, para acudir a la vendimia en Francia.
La localidad
jiennense es el centro donde se dan cita los autobuses procedentes de
casi todas las provincias andaluzas que llevan desde hace una semana a
miles de jornaleros a la vendimia francesa.
Dos centenares de
personas, cuatro autobuses, han parado en esta localidad para comer
y hacer un descanso en un viaje de casi dos días que supone el inicio
de un mes de trabajo por el que ganarán alrededor de 2.000 euros por
persona.
Este es el caso de Sergio y Ana, una pareja de
Granada, que han explicado, que viajan desde hace seis años a
Francia para la vendimia y que seguirán haciéndolo mientras continúe la
crisis económica.
Según el sindicato UGT, más del 70 por ciento
de los trabajadores españoles que van a la vendimia francesa son
andaluces, unos 10.400, de los que la gran mayoría, son de Jaén 3.450,
seguidos de Granada, Sevilla, Cádiz, Córdoba, Málaga y Almería.
Este año se ha incrementado en cien o doscientos el número de
jiennenses que viajan hasta el país vecino y aun así alrededor de mil
personas se han quedado en España por falta de contrato de trabajo para
ellos, según ha explicado el secretario general de la Federación
Agroalimentaria de UGT en Jaén, Antonio Marcos.
Además, ha
explicado que este año ha aumentado en un 50 por ciento la demanda de
personas que querían ir a la vendimia francesa, y que proceden
fundamentalmente de la construcción y del sector servicios, aunque
también son agricultores que "no han podido dar un jornal desde que
terminó la recogida de la aceituna".
Cada vez se necesita menos
manos de obra por la mecanización del campo y para trabajar en la
vendimia francesa hay contactar con los empresarios y agricultores
interesados en contratar gente e incluso algunas veces ya existen
contactos establecidos de años anteriores que organizan viajes para
grupos completos.
El salario mínimo, aunque se aplica según la
categoría profesional, es de 9 euros la hora en jornadas de 35 horas a
la semana, y hasta un máximo en cosecha de 72 horas a la semana, frente
a los 6,5 euros la hora que se paga en la vendimia en España.
Los autobuses, donde los sindicatos suelen proporcionar información
laboral relacionada con la vendimia francesa, tienen que pertenecer a
una línea autorizada para realizar este transporte, como es el caso de
Autocares Torralbo de Marmolejo (Jaén), que transporta a vendimiadores
desde toda Andalucía y parte del Levante.
Según ha explicado un miembro de la empresa este año se han adelantado los viajes unos
quince días, sin embargo todavía seguirán trasladando trabajadores
hasta la semana que viene los martes, jueves y sábado.
Las
regiones vitivinícolas, que en Francia ofrecen prácticamente la mitad
de todo el empleo agrícola temporal del país, en las que se tiene más
posibilidad de encontrar empleo en la vendimia son Aquitania,
Languedoc-Roussillon, Champaña Ardenas y Alsace.
La Federación
Agroalimentaria de Comisiones Obreras (CC.OO) prevé que en torno a
14.000 españoles acudan a trabajar a la vendimia francesa este año, una
cifra que se mantiene en línea a la registrada en 2010 debido a la
crisis económica y el aumento del desempleo.
