La empresa española había presentado una demanda contra las autoridades sanitarias.
Las autoridades de la ciudad-estado alemana
de Hamburgo restituyeron publicamente en un comunicado "el buen
nombre de Frunet" al subrayar que el levantamiento de la alerta sobre
pepinos, lechugas y tomates, lanzada por el brote infeccioso de la
bacteria "E. coli", incluye también a los productos de esa cooperativa
malagueña.
La empresa española había presentado una demanda
contra las autoridades sanitarias en la que reclamaba acceso a las
actas sanitarias que reflejan la decisión de culpar a los pepinos
españoles de ser los causantes de la infección.
Los abogados
esperaban poder demostrar que la senadora de Sanidad de Hamburgo,
Cornelia Prüfer-Storcks, actuó de manera negligente al no ordenar los
obligatorios contraanálisis de las pruebas sospechosas antes de culpar
públicamente a los pepinos españoles de la enfermedad y citar de forma
expresa a la cooperativa malagueña.
Los abogados de Frunet
informaron de que la víspera ambas partes llegaron a un acuerdo
extrajudicial para poner punto final a la demanda, después de que el
ministerio regional de Sanidad y Defensa del Consumidor rectificara y
rehabilitara el nombre de la cooperativa española de productos
agrícolas.
"De momento hemos conseguido todo lo que para
nosotros era deseable, importante y posible en este primer proceso",
declaró la abogada Sabine Pellens, del despacho de abogados
Lindenpartners, que representa los intereses de Frunet en Alemania en
la llamada crisis de los pepinos.
Al mismo tiempo, subrayó la mediación del Tribunal Contencioso-Administrativo para que ambas partes llegaran a un acuerdo.
Ahora el despacho de abogados debe analizar las actas presentadas por
las autoridades de Hamburgo en el procedimiento de urgencia para
estudiar las posibilidades de solicitar una indemnización por daños y
perjuicios.
En ese sentido, agregó la abogada, la empresa
española debe hacerse todavía una visión general de las pérdidas
sufridas como consecuencia de la crisis sanitaria que se ha cobrado al
menos 39 muertos en Alemania y otro en Suecia.
Desde Málaga, el
gerente de Frunet, Antonio Lavao, declaró estar muy contento por la
rehabilitación de su empresa por parte de las autoridades de Hamburgo y
señaló que supone un primer paso para recuperar la confianza de sus
clientes.
"Se nos ha mencionado directamente como el origen del
gran problema que hay en Alemania, pero no se nos ha nombrado
nuevamente de forma positiva" cuando se descartó que los pepinos
españoles fueran el foco del brote de esta cepa virulenta de la
bacteria intestinal, denunció a principios de mes.
Los representantes de la cooperativa malagueña, el mayor
productor de verduras de cultivo ecológico en la provincia española de
Málaga, habían viajado a Alemania para que se restituya su "buen
nombre", que ha pasado a estar "maldito".
Calificó de
"excesivamente grave" la situación que vive actualmente la empresa,
cuyo negocio se basa principalmente en la exportación y que "está
muerta desde las acusaciones".
"El mercado alemán es vital"
para la cooperativa, que exporta más del 30 por ciento de su producción
a Alemania, país con el que trabajan desde hace 15 años y donde cuenta
además con "los mejores clientes".