El consejero de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, visita la comarca de La Janda, donde han nidificado este año 12 parejas de esta ave.
El consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, José Juan
Díaz Trillo, ha visitado, en la comarca gaditana de La Janda, la
primera colonia reproductora de ibis eremita que se asienta en el
continente europeo desde hace cinco siglos. El acto ha incluido una
aproximación a El Tajo de la Barca de Vejer, entorno donde se ubican 3
de los 12 nidos formados este año por parejas de esta ave.
El
Proyecto Eremita, ejecutado por la Consejería de Medio Ambiente, se
inició en 2003 en colaboración con el Zoobotánico de Jerez, y con el
asesoramiento científico de la Estación Biológica de Doñana (CSIC) y
del Grupo Internacional de Expertos en Ibis Eremita. Tras siete años de
actuaciones experimentales aplicando un programa piloto para probar la
mejor metodología, se ha logrado el asentamiento de más de 60 aves en
libertad en la provincia de Cádiz, y la nidificación de las mencionadas
12 parejas. Díaz Trillo ha afirmado que "se trata de un éxito a nivel
mundial y un hito en la conservación de una de las aves más amenazadas
del planeta, ya que sólo existen 112 parejas reproductoras en Marruecos
y 3 individuos en Siria".
El consejero de Medio Ambiente ha
explicado que, tras tres años consecutivos en que una primera pareja se
ha reproducido de forma aislada en los acantilados del Parque Natural
La Breña y Marismas del Barbate, finalmente se ha formado en Andalucía
esta colonia reproductora, la primera de la que se tiene constancia en
Europa desde el siglo XV. De este modo se da por cumplido el objetivo
principal con el que nació el Proyecto Eremita: desarrollar un sistema
piloto para crear colonias silvestres de la especie a partir de
ejemplares procedentes de zoológicos.
Según el consejero, el
siguiente paso con relación a la conservación de esta especie será
realizar estudios poblacionales y de hábitats que ayuden a valorar la
viabilidad de esta colonia pionera asentada en Andalucía. En este
sentido, está previsto que estos trabajos se inicien a finales de año.
Actualmente,
ocho de las parejas reproductoras asentadas en La Janda se hallan en
periodo de incubación, y las otras cuatro en fase de instalación de sus
nidos. La evolución de las mismas es seguida con detalle gracias a los
sistemas de videovigilancia instalados por la Junta en los nidos, que
facilitan una intervención inmediata ante cualquier incidencia y
permiten una grabación continua de imágenes cuyo posterior análisis
ofrecerá detalles inéditos de la reproducción de esta especie en
libertad, y por tanto, un mayor y mejor conocimiento de la misma.
El
Proyecto Eremita se desarrolla en la comarca de La Janda (Cádiz), en
una zona propiedad del Ministerio de Defensa que reúne condiciones muy
favorables para la especie. Los objetivos de su primera fase
(2003-2008) han sido contribuir al conocimiento de la biología del ibis
eremita, sensibilizar sobre su crítica situación, y depurar la técnica
de suelta para fijar colonias estables a partir de aves procedentes de
cautividad.
Durante 2003 se realizó un estudio para conocer la
disponibilidad de hábitat y alimento, y durante los años siguientes se
ha venido realizando la suelta, seguimiento y posterior captura de
entre 25 y 30 aves cada año. Estos ejemplares proceden tanto del
Zoobotánico de Jerez como del programa internacional de cría en
cautividad, una labor realizada por técnicos (que actúan de 'padres
adoptivos') que acompañan a las aves en sus primeros vuelos y les
enseñan a obtener alimento y refugio.
El ibis eremita es un ave
colonial en peligro crítico de extinción a nivel mundial, que habita en
zonas áridas o semiáridas de estepas, pastizales y campos de cultivo.
Se alimenta principalmente de insectos y de pequeños vertebrados, y
nidifica en cortados y acantilados costeros. En un pasado lejano tenía
poblaciones por toda la cuenca mediterránea, incluida la Península
Ibérica, pero en los últimos años se ha perdido el 96% de la población
mundial debido a la pérdida de hábitat, persecución, y molestias
causadas por el hombre, contaminación por pesticidas y los efectos
derivados de la intensificación de la agricultura.