El
Consejo de Ministros ha aprobado el Acuerdo por el que se
formalizan los criterios de distribución y los compromisos financieros
resultantes de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo
Rural del 7 de marzo de 2011, por un total de 13.863.676 euros. De esta
cantidad, 4.000.000 euros se destinarán a programas de desarrollo rural
y 3.828.069 euros para líneas de actuación de los programas agrícolas y
ganaderos.
También, se ha
aprobado el reparto de 6.035.607 euros entre las Comunidades Autónomas
que solicitaron la medida para la financiación de intereses de los
préstamos concedidos a titulares de explotaciones ganaderas.
DESARROLLO RURAL
En
la reunión del Consejo de Ministros se ha aprobado la distribución de
4.000.000 euros para programas de desarrollo rural, en concreto para
los proyectos piloto asociados a la Red Rural Nacional.
Los
criterios de selección de los proyectos han sido la calidad técnica del
mismo, el grado de innovación del proyecto, de representatividad del
ámbito geográfico, el grado de transferencia del proyecto a otros
territorios, la consistencia del presupuesto del proyecto, los
resultados previstos y la contribución a la corrección de
desequilibrios medioambientales, socioeconómicos, culturales y
laborales, así como la incidencia sobre los colectivos de mujeres,
jóvenes y otros grupos de especial consideración.
PROGRAMAS AGRÍCOLAS Y GANADEROS
Dentro
del capítulo de programas ganaderos se ha repartido un total de
3.828.069 euros, destinados a la Prima Nacional Complementaria a la
Vaca Nodriza, utilizando como criterio de asignación el número de
derechos de prima por vaca nodriza comunicado por las Comunidades
Autónomas.
PRÉSTAMOS EXPLOTACIONES GANADERAS
Por
otra parte y para la financiación de intereses de los préstamos
concedidos en 2008 a titulares de explotaciones ganaderas se ha
acordado distribuir 6.035.607 euros entre las Comunidades Autónomas que
solicitaron esta medida.
Estos
préstamos se concedieron a los titulares de las explotaciones ganaderas
que durante el año 2007, y particularmente a partir del segundo
semestre, soportaron excepcionales incrementos en los costes de
producción como consecuencia de las elevadas cotizaciones de los
cereales debido a la coyuntura internacional, lo que se tradujo en un
encarecimiento de los piensos para el sector ganadero.