En la reunión se ha constatado que Indemnizaciones compensatorias adecuadas y nuevas tecnologías pueden hacer compatible la presencia del lobo con los aprovechamientos ganaderos.
El
Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, a través de la
Dirección General de Medio Natural y Política Forestal, ha convocado
con carácter de urgencia el Grupo de Trabajo del Lobo para estudiar la
situación de la especie, tomando en cuenta las últimas noticias de
ataques a explotaciones ganaderas.
El
Grupo de Trabajo, en el que han participado representantes de los
servicios competentes de las Comunidades Autónomas, ha analizado la
información existente sobre el estatus poblacional de la especie en
España, así como de la problemática que causa en relación con los daños
a las explotaciones ganaderas. En este sentido, parece constatarse una
ralentización en la expansión poblacional de la especie que se venía
produciendo durante los últimos años, así como una creciente
preocupación por los daños causados a la ganadería extensiva.
Recientemente,
el MARM incluyó las poblaciones de lobo de Castilla-La Mancha,
Extremadura y Andalucía en el Listado de Especies en régimen de
protección especial. Así mismo, se acordó poner al día la información
sobre el estado de sus poblaciones y reforzar el seguimiento de las
mismas.
En
este contexto, se han planteado diferentes líneas de trabajo
prioritario en el marco de desarrollo de la estrategia de conservación
y gestión de la especie:
- Mejorar el conocimiento de la especie y de su impacto en la ganadería extensiva, especialmente de las manadas más conflictivas.
- Incrementar esfuerzos en el ámbito de las medidas de indemnización compensatoria por daños a la ganadería.
- Identificar
e incentivar la aplicación de nuevas tecnologías para el desarrollo de
medidas de prevención de ataques y daños a la ganadería.
- Desarrollar un catálogo de medidas para la prevención de daños a la ganadería.
- Adecuar,
tal y como establece la estrategia nacional, el estatus legal de la
especie a la situación real de su estatus poblacional.
El
lobo es uno de los predadores más emblemáticos de nuestra fauna
silvestre. Habiendo co-evolucionado con los ungulados silvestres,
resulta fundamental para mantener el equilibrio en las cadenas tróficas
de los espacios naturales, especialmente en áreas con escasa presión
cinegética, donde las sobrepoblaciones de caza mayor causan grandes
pérdidas económicas en cultivos agrícolas y plantean muy serias
amenazas al estado sanitario de la ganadería extensiva.
Hacer
compatible la presencia de la especie con los aprovechamientos
ganaderos tradicionales, incentivando así mismo las sinergias en el
ámbito del desarrollo sostenible del medio rural, es un objetivo
prioritario d