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Las bajas temperaturas que se registran desde hace unos días en la provincia de Huelva retrasarán el inicio de la recolección de la fresa, previsto para principios de febrero, si bien no supondrá una merma en la calidad del fruto.

Alberto Garrocho, presidente de Freshuelva, asociación que aglutina a más del 95 por ciento de los productores onubenses, ha asegurado que las condiciones climatológicas actuales no suponen un daño para la fresa en sí, sino que lo único que provoca es "un retraso en la maduración".

Ha explicado que si las previsiones iniciales apuntaban a principios de febrero como momento de inicio de la recolección, las bajas temperaturas la retrasarán unas semanas más, lo que supondrá que comiencen estas tareas más de un mes después de lo que lo hicieron el pasado año.

Pese a esto, Garrocho ha subrayado que el frío "no merma la calidad del fruto" y que se estima que esta campaña la calidad sea "mayor" que la pasada, que estuvo marcada por condiciones climatológicas adversas, en este caso, temporales de lluvia que sí afectan al fruto.

Este año se recogerán en Huelva, principal exportador mundial de fresa fresca, unas 6.300 hectáreas de fruta, cifra similar a la del año pasado, cuya campaña se cerró con una producción total de fresa cultivada de 225.800 toneladas.

La campaña de la fresa 2010-2011 en Huelva cuenta con dos nuevas variedades autóctonas, la Primoris, de la que habrá unos 27 millones de plantas y se comercializará por primera vez, y la Antilla, que se encuentra aún en fase experimental y de la que habrá unas 600.000 plantas esta temporada.