La iniciativa surge a raíz de la dificultad para exportar hembras reproductoras malagueñas vivas para integrarlas en explotaciones de otros países.
La Asociación Española de Criadores de
la Cabra Malagueña exportará a partir del próximo año semen
congelado de macho caprino malagueño para atender la demanda de
países iberoamericanos y de la cuenca mediterránea interesados en
mejorar la producción de leche de sus cabras.
Así lo ha asegurado el secretario ejecutivo de este
colectivo, Juan Manuel Micheo, quien ha precisado que la iniciativa
surge a raíz de la dificultad para exportar hembras reproductoras
malagueñas vivas para integrarlas en explotaciones de otros países
por razones sanitarias y logísticas.
En el libro genealógico de la asociación están inscritas 35.000
cabras de la raza malagueña, de las que unas 28.000 se encuentran en
la provincia de Málaga, cuya peculiaridad reside en una "importante
producción de leche" de unos quinientos litros de leche al año y en
la carne de su cría, el chivo lechal malagueño.
"Su leche se diferencia del resto al tener mucha grasa y
proteínas, por lo que se necesita menos leche para hacer queso y
éste es de mayor calidad", ha indicado Micheo.
En cuanto al chivo lechal, ha señalado que, "aunque es un gran
desconocido" y precisa aún ser investigado, su carne es "tierna,
jugosa y rica en ácido oleico, por lo que resulta muy saludable".
Físicamente, la cabra malagueña se distingue por ser de capa
rubia, ya que normalmente su pelaje es de color marrón claro aunque
también puede ser oscuro, y de orejas horizontales "en forma de
avión".
Según ha declarado Micheo, se han exportado ejemplares de estas
cabras a países como Marruecos y Portugal y en la actualidad se está
negociando con Rumanía.
La exportación del semen de machos caprinos malagueños comenzará
en cuanto finalicen los trámites con la Consejería de Agricultura y
Pesca de la Junta de Andalucía, encargada de comprobar que se
cumplen las normativas europeas en este sector, y se realizará desde
un centro de inseminación ubicado en Casabermeja (Málaga).
Desde este centro, que ha sido recientemente reformado, la
Asociación Española de Criadores de la Cabra Malagueña insemina
alrededor de un millar de cabras al año y tras casi una década de
investigación ha conseguido un catálogo de "sementales mejorantes"
de los que se extrae el semen que será exportado.
"El proceso es largo porque desde que se elige a las mejores
cabras de la provincia y se extrae el semen a los hijos -cuando
están preparados para la monta, alrededor del año de vida- hasta que
se insemina a las hijas y éstas dan leche pasan unos cinco años", ha
explicado Micheo.
Para el desarrollo de esta tecnología de inseminación, la
asociación ha contado con la colaboración del Instituto Nacional de
Investigación Agraria y de la Universidad de Córdoba.