Las condiciones meteorológicas han marcado la campaña, que ha visto reducida la superficie de siembra desde las 9.384 hectáreas iniciales hasta las 7.813 hectáreas efectivas.
COAG Andalucía ha presentado en Jerez los datos de
previsión de la campaña de remolacha que dará comienzo la próxima semana,
concretamente el martes 22 de junio.
En rueda de prensa, el responsable de remolacha de COAG
Andalucía y secretario general de COAG Sevilla, José Antonio García, junto con
el secretario general de COAG Cádiz, Miguel Pérez, han explicado que las
inclemencias climatológicas han marcado esta campaña de remolacha que ha visto
reducida su producción y la superficie de manera significativa.
Al inicio de la campaña fueron contratadas 654.000
toneladas, lo que supuso la siembra de 9.384 hectáreas en
un total de 1.306 contratos. De esta superficie, 2.723 ha se sitúan en
Cádiz y 6.661 ha
en Sevilla. Teniendo en cuenta el sistema de cultivo, 1.320 ha son de secano y 8.064 ha de regadío.
Pero las inclemencias climatológicas ha hecho imposible
cumplir con lo previsto inicialmente. Así, la superficie de secano se ha visto
reducida a 771
hectáreas por la escasez de lluvias durante la época
natural de siembra. Posteriormente, cuando el cultivo de regadío se hallaba en
los primeros estadios de desarrollo (según la zona y fecha de siembra entre
cotiledones desplegados y 2-4 hojas verdaderas), se registraron temperaturas
bajo cero los días 14 y 15 de diciembre (hasta -5 º C en algunas zonas) que
produjeron daños importantes en el cultivo. Por último, el día 16 de diciembre
comenzó un período de precipitaciones que ha supuesto el descenso de la
superficie de riego hasta las 7.042 hectáreas.
Con esto, según el último aforo de la industria (de fecha
15 de junio) la recolección esperada se sitúa en las 424.675 toneladas, frente
a las 654.000 toneladas contratadas. De ellas, 101.908 toneladas
corresponderían a Cádiz y 318.862
a Sevilla, siendo meramente testimonial la presencia en
otras provincias. Ante esta situación de pérdida y merma de plantas, COAG
propuso en la mesa zonal celebrada el pasado 11 de febrero abrir un plazo de modificación
de contratos para evitar penalizaciones por incumplimientos, propuesta que se
aceptó de forma unánime.
Desde que se aprobara la nueva OCM del azúcar, el sector ha
vivido un fuerte proceso de reestructuración que ha provocado una considerable
pérdida de superficie, habiéndose pasado de las 36.590 hectáreas
de la campaña 2005/2006 a las 9.384 hectáreas sembradas este año.
Además, el cultivo ha sufrido una pérdida de rentabilidad
por la reducción del precio de la remolacha, hecho que ha supuesto un esfuerzo
fundamental de los agricultores y de COAG para asegurar el futuro del cultivo.
De esta manera, aunque en la presente campaña se alcanza el
precio mínimo de la remolacha establecido por OCM, debemos destacar que es el
primer año en que se cobrará en el sur la ayuda acoplada por el abandono del
50% de la cuota a nivel estatal, que se estima en 6,63 €/t, por lo que los
ingresos se sitúan en torno a los 43,29-44,29 t/ha en regadío y los 44,19-44,9
t/ha en secano una vez descontado el canon de producción (se incluyen precio
mínimo, artículo 69, ayuda por abandono del 50% de la cuota estatal y acuerdos
por la pulpa, excluidos IVA y compensación por portes).
Al descenso de superficie y producción sufrido como
consecuencia de la reestructuración del sector (la reducción del 62% de la
superficie, del 55% de la cuota de producción han supuesto el cierre de 3 de
las 4 fábricas y un descenso de los 593.626 jornales antes de la reforma a
220.486 en la campaña 2008/2009), hay que sumar los efectos catastróficos que
han provocado las inclemencias meteorológicas, que han reducido el número de
jornales hasta los 141.123, lo que supone un varapalo para las provincias de
Sevilla y Cádiz.
Ahora sólo queda esperar que, en los 50 días que dura la
campaña, contados a partir del próximo día 22 de junio, los rendimientos de
parte de la superficie aumenten un poco.
El sector en Andalucía
En estos
momentos, viven de la remolacha más de 1.300 familias del Bajo Guadalquivir
(Sevilla y Cádiz), una comarca que ha visto cómo la Política Agraria
Comunitaria también ha tenido consecuencias nefastas sobre otros sectores
emblemáticos como el algodón. Por ello, esta organización agraria sigue
trabajando para mantener la superficie y
la rentabilidad para los productores, garantizando
así el futuro de este cultivo y de todo el tejido socioeconómico vinculado a
él.