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La Política Agrícola Común (PAC) supone el 0,92 por ciento del gasto público total de la Unión Europea (UE) y el 0,43% de su Producto Interior Bruto (PIB), según un informe de la Comisión Europea (CE).

El documento, realizado por la dirección de Agricultura de la CE, trata de poner en perspectiva los datos sobre el dinero dedicado a la PAC, el aspecto más controvertido de esa política.

Señala que si bien es cierto que la PAC absorbe casi la mitad del presupuesto comunitario, a la hora de contabilizar el total de los gastos públicos de la UE apenas representa un 1%.

En efecto, los fondos para la agricultura ascenderán en 2010 a 58.068 millones de euros (esta partida incluye también la pesca), lo que supone un 46% del presupuesto total comunitario.

El informe de la CE recuerda que la razón de que la PAC abarque tanta proporción es que es una de las pocas políticas financiadas con el presupuesto de la UE.

Además, señala que en los últimos años el peso ha descendido en los últimos 20 años, para pasar del 75% al porcentaje actual e indica que en este período, la ampliación de la UE ha duplicado el número de agricultores comunitarios con lo que el gasto por productor es muy inferior en la actualidad respecto al pasado.

"Esto es más chocante teniendo en cuenta la estructura de las economías de los países que han entrado desde 2004, en los que el sector agrario representa un mayor porcentaje de la economía que en el caso de los antiguos Estados miembros", según el documento de la CE.

Asimismo, el informe defiende las reformas de la PAC realizadas en los últimos años y apunta que aunque está claro que hace falta una política agraria "la pregunta es si debe ser comunitaria".

La UE avanzará en 2010 sobre los debates acerca de la PAC a partir de 2013, en el marco de las discusiones generales sobre el futuro del presupuesto comunitario.

En el caso de la agricultura, apunta la CE, los asuntos centrales en juego serán cómo ajustar las subvenciones actuales, que se dan en forma de pago único por hectárea o explotación; cómo tratar con crisis de mercado en el futuro y cómo incrementar la eficacia de los planes para el desarrollo rural -medidas para fomentar en el campo actividades distintas o complementarias a las agrícolas-.