El fomento de la Dehesa será factor clave en la lucha contra el cambio climático y la consolidación de una modelo de Economía Sostenible.
Las consejeras de Agricultura, Clara Aguilera, y Medio
Ambiente, Cinta del Castillo han asegurado ante los agentes del sector,
reunidos en Córdoba, que uno de los beneficios fundamentales de la futura Ley
de la Dehesa
para los propietarios de fincas ubicados en estos espacios será una importante
simplificación de los trámites administrativos para la gestión de ayudas.
Asimismo, han señalado que dicha ley supondrá el reconocimiento oficial ante la UE de un modelo único de
explotación agroganadera y forestal.
Ambas consejeras han definido la Ley de la Dehesa como marco normativo
que ampara un modelo de Economía Sostenible, con un importante valor ambiental,
paisajístico y socioeconómico. Igualmente, las titulares de ambas Consejerías
han asegurado que la gestión integral de la Dehesa será factor clave en la lucha contra el
cambio climático y en la prevención de incendios.
El proyecto de Ley de la Dehesa, aprobado recientemente en Consejo de
Gobierno, presta el marco regulador para asegurar la conservación y la
viabilidad económica de un sistema de explotación sostenible de los recursos
agroganaderos y forestales, sin precedentes en Europa, y que en Andalucía ocupa
1,25 millones de hectáreas (la mitad del total nacional). El texto, que será
remitido al Parlamento para su aprobación definitiva, ha sido elaborado por las
consejerías de Agricultura y Pesca y Medio Ambiente.
La futura ley propiciará un modelo de gestión única de todos
los usos y aprovechamientos de este espacio agrario y forestal, que beneficiará
a los titulares de las explotaciones con incentivos, y, como novedad destacada,
servicios específicos de asistencia técnica a la dehesa.
Para actuar sobre estos espacios, dentro del período
2009-2013, la Junta
de Andalucía destinará un importe de 180,5 millones de euros, que será
cofinanciado al 75% por el nuevo Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural
(Feader).
Entre otros instrumentos de protección, gestión y promoción,
el proyecto establece la elaboración de un Plan Director de ámbito general,
herramienta de gestión global de la nueva ley, con una vigencia de 20 años y
revisiones intermedias cada cinco.
El Plan Director de las Dehesas de Andalucía se complementará
con los correspondientes planes de gestión integral que podrán desarrollar
los titulares de las explotaciones, con carácter voluntario, aunque su
realización será requisito prioritario para acceder a las ayudas públicas,
tanto agrarias como ambientales.
Aparte de a las explotaciones con planes de gestión, la ley
también prestará especial atención a las dehesas ubicadas en espacios naturales
protegidos y a aquéllas que incorporen producciones integradas o de ganadería
ecológica. Para acceder con carácter general a los incentivos y medidas de
apoyo será necesaria la inscripción en el Censo de Dehesas de Andalucía, de
nueva creación.
La nueva ley también contempla la participación de dos
órganos de nueva creación en el desarrollo de las medidas previstas. Por un
lado, la Comisión
Andaluza para la
Dehesa, que integrada por representantes de las consejerías
de Agricultura y Pesca y de Medio Ambiente, se encargará de coordinar los
trabajos del Plan Director, proponer medidas de protección y fomentar actividades
de investigación, formación, divulgación y participación social, entre otras
funciones. Por otro, el Centro Andaluz de Investigación de la Dehesa, en el que tomarán
parte universidades, organizaciones privadas de investigación y empresas y
asociaciones del sector.