Asimismo, ha insistido en que "en ningún caso" se trata del subtipo H5, sino del H7, que es "altamente patógena en aves".
El director general de Producción Agraria de Castilla-La
Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha confirmado que la muerte y
sacrificio posterior de miles de gallinas en Almoguera (Guadalajara)
está motivada en una influenza (gripe) aviar solamente contagiosa entre
aves, del subtipo H7, y ha atribuido el contagio "posiblemente", a aves
migratorias.
Martínez
Arroyo ha incidido en que se trata de una "gripe que no es contagiosa
para el ser humano, salvo en los casos de contacto extremo, cercano y
continuado con el agente, y esto no se da".
Asimismo, ha insistido en que "en ningún caso" se trata del subtipo H5, sino del H7, que es "altamente patógena en aves".
Hasta
el momento este tipo de gripe sólo se ha dado en una explotación de
Almoguera, en la que se sacrifican unas 310.000 gallinas ponedoras
después de la muerte repentina de 2.000.
Martínez
Arroyo ha dicho que no es un problema de salud pública, pero "sí es un
problema importante desde el punto de vista económico para el sector
agroalimentario de Castilla-La Mancha".
También
ha manifestado que "en ningún caso" es posible la transmisión de la
enfermedad por vía digestiva, aunque se consumieran los huevos.
En
Castilla-La Mancha existen alrededor de 17 millones de gallinas tanto
de recría como ponedoras, y Guadalajara es la provincia más importante,
con alrededor de 7 millones y 46 explotaciones, siendo 130 en la región.
Ha
quedado prohibida ya la suelta de animales silvestres para caza en la
zona afectada -en un radio de diez kilómetros a partir del foco- y se
trabaja para alertar a todos los guardas medioambientales para que
conozcan el hecho.
Martínez
Arroyo ha relatado que el brote se conoció el día 5, cuando se detectó
una mortalidad "importante" en una de las naves de una granja de
Almoguera.
Días después se
detectó otro foco en otra de las cinco naves de esta explotación, y
"parece ser que ahora pudiera haber problema en una tercera".
A
partir del día 6, por decisión del propio ganadero, ante el temor de
contagio masivo, no hubo ninguna salida ni entrada de animales, ni
muertos ni vivos, ni de huevos, y ayer, día 12, comenzó el sacrificio
de todas las gallinas de la explotación (unas 310.000 aproximadamente).
La
Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural puso en marcha el
protocolo de lucha contra la gripe aviar en un radio de actuación de un
kilómetro desde la explotación afectada.
También
se decidió inmovilizar la entrada y salida de aves y de huevos de las
granjas situadas en un radio de diez kilómetros, como medida preventiva
y para dar tranquilidad a la opinión pública, a pesar de que -según
aclaró- el protocolo no era tan riguroso.
Se
han tomado también muestras de las seis granjas que hay en este radio,
e incluso en un radio de doce kilómetros "como medida de prudencia"
también se están haciendo analíticas pese a no ser necesario.