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La Federación de Arroceros de Sevilla ha exigido a las administraciones claridad y una información fehaciente sobre el proyecto de modernización del riego en las márgenes del río Guadalquivir y sobre todo a quien corresponde el pago de dicha obra.

En un comunicado, los arroceros piden a las administraciones "amparo urgente" y sobre todo "mucha prudencia ante el peliagudo" asunto del dragado de profundización del Guadalquivir, que esta federación rechaza tal como está planteado porque aumentaría la salinidad del agua y perjudica al cultivo del arroz.

Según los arroceros, el puerto de Sevilla está en una "dramática encrucijada tras concluir una esclusa antes de tener unos parámetros meridianamente claros y ahora se agotan los plazos que tenían que haber calculado desde el minuto uno en el que se planteó una obra de estas características".

Ante esta situación, el sector del arroz advierte de que "no son ellos los que paguen esa falta de previsión" y añaden que "alguien tendrá que responder por la falta de previsión, que se convierten en aterradoras inversiones por amortizar y posiblemente la causante de futuras e innecesarias causas judiciales".

Precisan que no hablan de "corrupciones ni de ilegalidades, sino de eficiencia y eficacia en la gestión de tan ingente cantidad de recursos públicos", en alusión a los 180 millones en que está presupuestada la obra del riego del arroz en los márgenes del río.

Los arroceros instan a las administraciones a que definan quienes son los responsables del pago de dicha obra y en qué medida corresponde al Puerto de Sevilla o a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

También advierten de que se ven obligados por los aumentos de los costes eléctricos a ser "extremadamente cautos en cualquier tipo de inversión que se plantee" y apuntan que será prioritario definir los coste por hectárea final.

La Federación de arroceros de Sevilla ha abogado por abandonar los "orgullos taifistas y empezar a mirar al futuro con perspectiva, sin la arraigada costumbre nacional de destruir al vecino y su casa para ampliar la propia".