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Los trabajadores de la planta de Puleva de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) se han concentrado en el centro de Sevilla tras realizar una marcha a pie desde la puerta de su centro de trabajo, en este municipio situado a 10 kilómetros de la capital, para mostrar su rechazo al cierre de la fábrica.

Los trabajadores, que partieron a las 9 de la mañana de las puertas de la fábrica, finalizaron su marcha pasadas las 12.00 horas en la Plaza Nueva, en pleno centro de la capital.

El comité de empresa denuncia que Lactatis, la empresa que engloba a Puleva, pretende enmascarar esta situación con una mesa negociadora sobre la movilidad geográfica que pretende el traslado de trabajadores a Granada, pero que en realidad solo afectaría al 50 por ciento de los trabajadores afectados. Según los representantes de los trabajadores, en realidad, un número importante de empleados quedarían expuestos a ser trasladados a Mollerusa (Lérida) o Galicia.

Los trabajadores de la factoría sevillana celebraron este pasado jueves una concentración ante el Parlamento de Andalucía y mantuvieron encuentros con representantes de los tres grupos parlamentarios -PP, PSOE e IU- que se comprometieron a consensuar una declaración institucional en la Cámara autonómica.

Concretamente, el pleno ha aprobado  la declaración institucional en la que manifiesta su "más firme apuesta" por la continuidad de la factoría de Puleva en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y pide a la empresa Lactatis que reconsidere la decisión del cierre.

La declaración institucional, leída por el presidente de la Cámara, Manuel Gracia, insta al Consejo de Gobierno a que exija el cumplimiento íntegro de las condiciones a las que se hubieran supeditado las ayudas concedidas a las empresas industriales ante una posible situación de deslocalización.