La competencia desleal que sufrie esta IGP viene de conservas de terceros países como Marruecos o Cabo Verde
El Consejo Regulador de las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) 'Melva y Caballa de Andalucía' ha denunciado que sufren una pérdida de rentabilidad en la venta de sus productos como consecuencia de la competencia desleal de terceros países que ofertan conservas de menor calidad a precios bajos.
El secretario general del consejo regulador, Manuel Becerra, ha explicado que en España los productos de las empresas amparadas por esta IGP, elaborados de forma "totalmente natural", "se venden a un precio inferior al que se debiera que, si bien, no están por debajo de los costes de producción, sí que hace que perdamos muchos beneficios".
Ello es debido, ha indicado, a la competencia desleal que vienen sufriendo con conservas de terceros países como Marruecos o Cabo Verde cuyos productos "entran en España a precios más bajos ofertados en iguales condiciones a los nuestros cuando en nada tiene que ver nuestro proceso de producción con los suyos". En este sentido, Becerra ha explicado que "la forma de manipulación del pescado de las conservas andaluzas aporta un marchamo de calidad que no lo tienen las que se importan de otros países".
En Andalucía se lleva a cabo un proceso natural y a mano del pelado del pescado mientras que en esos otros países apuestan por procedimientos en los que se utilizan agentes externos como la sosa cáustica que "terminan quitándole la piel y sacándole el aceite natural al pescado", ha indicado.
Becerra considera "la diferencia de precios que tendría que haber entre unos y otros productos, simplemente, por la excelencia en la calidad que presentan los nuestros no se da". Y frente a ello, ha apuntado, lo que puede hacer el sector, en un momento en que la apertura de fronteras es más fuerte que nunca, es "seguir apostando por ser más competitivos y luchar por demostrar que tenemos esa calidad excepcional de forma a que el consumidor esté dispuesto a pagar lo que valen nuestros productos.
En el 2012, la elaboración de alimentos con esa enseña de calidad alcanzó 1.300 toneladas de caballa y 650 toneladas de melva, con una facturación cercana a los quince millones de euros. El principal mercado para las conservas con IGP es el nacional, especialmente Andalucía, la zona del Levante, Madrid y Barcelona.
