Pocas compraventas, por tanto, entre almazaras y entidades comercializadores del 15 al 21 de junio, unas 2.000 toneladas, lo que supone un fuerte descenso del 67,27 % respecto a la semana anterior
La semana oleícola concluye con un repunte de los precios en origen en ambos extremos -tanto de los vírgenes extra como los de inferior calidad-, aunque con menos operaciones, y también con creciente incertidumbres del olivarero, a una semana del cierre de la reforma de la Política Agraria Común.
Pocas compraventas, por tanto, entre almazaras y entidades comercializadores del 15 al 21 de junio, unas 2.000 toneladas, lo que supone un fuerte descenso del 67,27 % respecto a la semana anterior, con repuntes para los vírgenes extra, que ya se pagan a 2,84 euros/kg (+0,78 %) de media, aunque se han registrado operaciones por encima de los tres euros, según recoge POOLred. Sin embargo, en el último mes (entre el 21 de mayo y 21 de junio) ha repuntado un 41 % el volumen de transferencias de aceite, con algo más de 27.400 toneladas, según este sistema de información.
Respecto al resto de categorías, fuerte incremento de los valores en la última semana para los aceites de calidad inferior (+18,61 % y 2,29 euros/kg) aunque retrocedieron ligeramente los vírgenes (-0,39 % hasta 2,53 euros/kg) y lampantes (-0,21 % y 2,40 euros/kg).
Infaoliva informaba de valores de 2,64 euros para el virgen extra picual; 2,50 para el virgen y 2,37 para el lampante. En el largo plazo, del 13 al 19 de junio se negociaron en el Mercado de Futuros 1.261 t de aceite de oliva, con contrataciones en todos los vencimientos -los más activos han sido julio y noviembre de 2013, con 955 y 225 toneladas- y precios al alza. Estos han variado desde 2.080 de julio de 2014 y 2.470 euros por tonelada en septiembre de 2013 (2.160-2.480 euros una semana antes).
Agricultura constató durante la segunda semana de junio una subida para el virgen (+1,70 % y 253,65 euros/100 kg), lampante (+1,82 % y 238,96) y orujo crudo (+1,40 % y 123,40) en el mercado de contados, mientras cayó el del girasol (-1,55 % y 101,98 euros). Por plazas de referencia, el mejor comportamiento corresponde a Tarragona, con ascensos por encima de 12,02 euros por 100 kilos para los de mayor calidad, tanto vírgenes extra como los vírgenes. También experimentaron destacadas subidas en el período los lampantes en Córdoba y Málaga, en la misma sintonía que Tarragona, aunque Sevilla retrocede ligeramente respecto a una semana antes.
En Italia se produce en este mismo tramo temporal leves variaciones de precios, menos el lampante, que pierde tres céntimos respecto a la anterior cotización y se sitúa en 2,20 euros/kg. El extravirgen se deprecia apenas un 0,2 %, si bien esta caída llega al 1 % en plazas como Foggia, según Ismea, mientras que el virgen se mantiene estable en 2,46 euros/kg en ese país.
Por áreas geográficas, hay más alegría en el comercio del producto en Puglia, subidas de precios en Calabria y estabilidad y menos demanda en Sicilia, según aclara esta misma fuente. Tendencia alcista en el mercado de los vírgenes extra griego y tunecino y pocas variaciones para el resto de las categorías.
De vuelta a España, la crisis pasa factura al "oro líquido", hasta el punto de que las ventas de los aceites de oliva en los cinco primeros meses del año cayeron un 10,7 % respecto al mismo período de 2012, hasta 141 millones de litros, según Anierac.
La comercialización total de los aceites de semillas alcanzó 119,7 millones de litros y se redujo un 6,2 %, en un segmento que lidera el girasol, con 100,9 millones de litros (-7,8 %).
De octubre de 2012 a mayo de 2013, los socios de Anierac vendieron 225 millones de litros de "olivas" (-9,7 %), con un una bajada del 7 % en el "virgen extra", del 20,35 % del "oliva suave" y del 15 % del oliva "intenso", frente al alza del 54 % del "virgen".
De la actualidad del sector, destacable el anuncio del ministro Miguel Arias Cañete de prohibir las aceiteras rellenables en los restaurantes pese a que no fue respaldada a nivel europeo.
Una medida que aplauden productores, cooperativas, almazaras y envasadores aunque podría no gustar a los restauradores por el aumento de costes que implica para un sector tocado por la crisis.
De otro lado, cooperativas y productores olivareros no ocultan su preocupación y nerviosismo en la recta final de la reforma de la PAC -prevista para la semana próxima- y, sobre todo, de cara a la aplicación nacional y el reparto de las ayudas que, si hubiese una convergencia interna dura, les restaría fondos, según temen.
Fuentes cooperativas argumentan que hay tantos flecos abiertos que aún no hay elementos suficientes para valorar cómo puede afectar la reforma; desde UPA prosiguen su proceso de movilización y tractoradas y COAG "da margen" al ministro y espera sus "respuestas" al olivar pero no descarta movilizaciones contundentes en el olivar.
Asaja insiste también en los peligros de la convergencia interna y en la necesidad de evitar transferencias de ayudas en el campo.
A nivel agronómico, el gran aumento de las temperaturas, ha favorecido la actividad vegetativa del cultivo y acelera el cuajado de los frutos en las principales comarcas productoras, aunque también puede favorecer el desarrollo de las plagas.
