Ha sido uno de las principales medidas analizadas por el grupo de trabajo del olivar que ha reunido en Madrid a representantes de organizaciones agrarias y de cooperativas con el subdirector general de Análisis, Prospectiva y Coordinación, y con el director de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa)
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) ha propuesto al sector agrario una plan de financiación -con ayudas a los avales necesarios para que el agricultor acceda a préstamos-, ante la caída de producción de aceite de este año provocada por la última sequía.
Ha sido uno de las principales medidas analizadas por el grupo de trabajo del olivar que ha reunido en Madrid a representantes de organizaciones agrarias y de cooperativas con el subdirector general de Análisis, Prospectiva y Coordinación, Ignacio Atance, y con el director de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa), José María García, según han indicado fuentes del sector.
El jefe de los Servicios Fiscal y Laboral de Asaja, Juan José Alvarez, ha calificado de "positivas" las medidas que el Ministerio de Agricultura ha implementado para el olivar, tanto las ya aprobadas -rebajadas de módulos para la actual declaración de la renta al 0,18 % que se añade a la reducción al 0,26 en noviembre- las próximas en llegar, como la línea de crédito avalada por Saeca.
Alvarez ha detallado que el Ministerio se ha comprometido en que en unos días estará lista la Orden que impulsará esta línea de crédito con un volumen máximo de 15 millones de euros para subvencionar los avales necesarios para que los olivareros puedan solicitar préstamos a sus entidades financieras.
El Ministerio de Agricultura subvencionará el coste de los avales para los préstamos, que serán de hasta 40.000 euros por titular y un plazo de amortización no superior a los cinco años, pudiéndose incluir en éste un año de carencia.
Por su parte, el Gobierno recuerda que los daños del año pasado por adversidades climáticas deben ser solventados por los seguros agrarios, mientras que estudiarán las medidas que puedan ponerse en marcha para los afectados por inundaciones de 2013 en el futuro, según ha apuntado Alvarez.
Desde los Servicios Técnicos de COAG, José Luis Miguel ha aclarado que tendrán que estudiar los detalles del borrador de orden que recoge el plan de financiación para el olivar, que plantea préstamos de hasta 40.000 euros y, para los titulares de entre 5 y 10 hectáreas, se plantea un tope de 12.000 euros.
Se subvencionarán los gastos de comisión de estudio y gestión de los avales de Saeca, precisa Miguel, como el Ejecutivo ha hecho en situaciones similares, aunque COAG advierte que "habrá a quien le venga bien, pero en la práctica la mayoría del sector está harta de deudas y lo que quiere es quitárselas de encima y poder respirar".
Así lo indicó en referencia al elevado endeudamiento del olivar y sus problemas de rentabilidad, al encadenar varios ejercicios con precios del aceite muy bajos: "nosotros entendemos que las medidas son insuficientes" porque no se recogen exenciones o aplazamientos de ciertos pagos, como a la Seguridad Social, que el campo necesita. "El sector está muy machacado; su situación es insostenible", agrega Miguel, quien critica que no se recojan apoyos para paliar los daños extraordinarios por las graves inundaciones de este año en Extremadura.
El secretario de Agricultura de UPA-UCE Extremadura, José Cruz, ha denunciado también que el Gobierno no haya planteando "ni una sola medida para paliar los daños de las últimas inundaciones por los desembalses en la Cuenca del Guadiana", de finales de marzo y principios de abril, con "pérdidas tremendas" al patrimonio del agricultor que no están cubiertos por los seguros agrarios.
UPA calcula entre 43 y 45 millones de euros las pérdidas en explotaciones e infraestructuras agrarias por esas inundaciones que afectaron entre 800 y 1.000 agricultores y que, en muchos casos, los dejó sin tierras fértiles -lo que lastrará futuras cosechas-. Ha recordado que el Gobierno regional ha previsto ya una partida presupuestaria para arreglar equipamientos públicos e infraestructuras por valor de 14 millones de euros, mientras que el Ejecutivo central no plantea apoyos para los agricultores que hayan sufrido daños extraordinarios en su patrimonio. UPA ha pedido incluso al Ministerio que declare a las áreas del Guadiana afectadas como zonas de emergencia y naturaleza catastrófica.
Respecto al plan de financiación propuesto por el Ministerio para contrarrestar la caída de esta cosecha por la última sequía, el responsable de UPA ha mostrado dudas sobre su eficacia. "Ya veremos su efecto", comenta Cruz, quien ha subrayado que el sector está muy endeudado y ha añadido que las entidades financieras tienen restringido el crédito, más aún a los agricultores.
