Las cooperativas constatan los bajos rendimientos y producciones obtenidas en una de las campañas olivareras más cortas de los últimos años.
El mercado en origen del aceite de oliva "se calienta" con subidas generalizadas de los precios durante la última semana, repuntes que podrían no ser los últimos debido a la escasa oferta de los olivos por la última sequía, lo que está obligando a los envasadores a "salir de compras" al exterior.
España triplicó durante el mes de octubre sus importaciones en tasa interanual y las duplicó en noviembre -últimos datos disponibles-, adquisiciones desde países del área mediterránea que podrían continuar altas en próximos meses.
Las cooperativas constatan los bajos rendimientos y producciones obtenidas en una de las campañas más cortas de los últimos años, aunque se ha evitado de momento una pérdida de mercados y la "catástrofe" económica para los operadores, gracias a las reservas acumuladas del ejercicio anterior -el enlace rondó las 700.000 t-.
Las organizaciones agrarias creen que esta campaña se lograrán solamente 600.000 ó 625.000 toneladas de aceite, lejos de las cifras del ejercicio anterior (1,61 millones de t), lo que obligaría a España -siempre y cuando las previsibles alzas de precios no implique una drástica pérdida de consumo- a importar 100.000 toneladas en un contexto de ajustadas disponibilidades mundiales.
Pero, ¿es posible entrar a una situación de carestía, desabastecimiento o precios prohibitivos para el consumidor? Los oleicultores no desean encarecimientos desmesurados que lastren las ventas -no los descartan- y, sobre la escasez, también es probable que se produzca a finales de la campaña 2012-2013.
Si la campaña 2013-2014 llegara con buenos augurios en producción, el mercado se relajaría. Pero si se suma una nueva recolección de aceituna baja, el problema estaría servido para todos los eslabones de la cadena alimentaria por falta de oferta y pérdidas de mercados: olivareros, almazaras, envasadores, comercializadores y distribución.
De momento, el Sistema de Información de Precios en Origen (POOLred) recoge una caída de los volúmenes negociados entre el 5 y el 11 respecto a la semana anterior, con algo más de 5.500 toneladas (-27,27 %), aunque con importantes revalorizaciones.
En la última semana, suben un 2,72 % los precios de los vírgenes extra, que cotizan ya a 2,90 euros/kg y apuntan hacia la barrera psicológica de los 3 euros.
Mayores aún fueron las alzas de los vírgenes (+3,45 % y 2,78 euros/kg), los lampantes (+4,55 % y 2,71 euros) y, especialmente, los aceites de inferior calidad (+12,37 % y 2,42 euros/kg).
Del 11 de diciembre hasta el viernes, aumentaron las cantidades transmitidas entre almazaras y comercializadoras en un 60 %, con cerca de 33.000 toneladas y fuertes revalorizaciones respecto al mes anterior, de entre el 8,76 % y el 13,47 % según categorías.
El Observatorio de la patronal de almazaras industriales Infaoliva también recoge cotizaciones de 2,86 euros/kg para el virgen extra (aunque el miércoles llegó hasta lo 2,90); de 2,75 euros/kg para el virgen y de 2,70 para el lampante.
En el largo plazo, del 3 al 9 de enero se han negociado en el Mercado de Futuros un total de 1.770 toneladas de aceite de oliva lampante, con enero de 2013 como mes más activo (620 t) y precios que han variado desde los 2.470 euros/t de enero de 2014 a los 2.890 para julio y septiembre del 2013.
La recolección entra en su recta final en una época inusual en la que deberían estar en pleno apogeo todos los tajos e incluso muchas almazaras han concluido ya la molturación de las aceitunas, escasas por los efectos de la última sequía y la vecería.
El ejercicio se saldará con pocos volúmenes disponibles para vender y con gran pérdida de peonadas para los asalariados del campo, que miran con expectación a la reunión de sindicatos y Ministerio de Empleo prevista para la próxima semana, de la que podría salir una flexibilización de los criterios de acceso a la renta agraria.
