CCOO ha anunciado que la recogida de la aceituna 2009-2010
será una campaña "tensa" y "difícil" ante el excedente de
mano de obra causado por el aumento de la demanda y el "fuerte"
descenso de la oferta.
El secretario general del Sindicato Provincial
Agroalimentario de CCOO, Rafael Estévez, ha indicado en conferencia de prensa
que este año prevé que la recogida produzca entre 200.000 y 230.000 toneladas
de aceite recolectadas por unos 2 millones de jornales, en un período de
campaña que se prolongará hasta marzo de 2010.
Estévez ha recordado que durante la celebración de la
comisión de flujos migratorios de los distintos agentes sindicales, se acordó
este año que "ante la situación de desempleo actual",y la cantidad de
inmigrantes existente, no hacía falta contratos de mano de obra en origen, por
lo que apostaron por un contingente cero.
Además, ha señalado que en la actualidad "sólo"
hay trabajo para unas 50.000 personas, aunque ya hay 80.000 inscritas en el
Régimen Especial Agrario, por lo que "sobran" 30.000 personas.
Estévez ha pedido a la Administración que
aumente el seguimiento de la situación de los trabajadores del campo, que
realice más inspecciones laborales y regulen la contratación del empleo a
través del Servicio Andaluz de Empleo (SAE).
Por su parte, el secretario de Migraciones del sindicato,
Said Faz, ha informado de que en la campaña de la aceituna de la provincia de
Córdoba participarán unos 5.000 inmigrantes.
Faz ha avisado a la población inmigrante que no vega "a
ciegas", ya que la situación es difícil y las infraestructuras de acogida
"brillan por su ausencia" en Córdoba.
También ha comentado la necesidad de evitar mensajes
xenófobos y ha insistido en que "los culpables del conflicto del campo no
son los trabajadores, sino la crisis y aquellos que la han provocado".
Tanto Faz como la secretaria de inmigración de la Federación
Agroalimentaria de Andalucía, Aurora Martín, han subrayado la
importancia de reforzar el SAE y acelerar su eficacia "contribuyendo así a
la lucha contra la explotación laboral, una lacra provocada también por las
patronales que aprovechan la situación para beneficiarse y perjudicar a los
trabajadores".