Las cooperativas prevén una producción nacional de 41,5 millones de hectolitros, un 6,3 % menos que la pasada campaña
Bodegas, cooperativas y otros operadores de vino encaran la nueva vendimia española con más tranquilidad que en el ejercicio pasado y sin temor a que regresen las tensiones de mercado, gracias a la buena evolución de las ventas y de los stocks, que son los normales para esta época del año.
Las existencias de vino arrojan cifras "muy razonables", en la media de los últimos años, en torno a los 10 millones de hectolitros de vino y mosto, lo que supone 4 millones de hectolitros menos que en 2014 a estas alturas de campaña, según los datos que maneja Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha.
La organización prevé una cosecha de vino y mosto regional de 22 millones de hectolitros -frente a los 25,12 del ejercicio anterior-, aunque la climatología tiene la llave: si llueve podría aumentar esta cifra pero, si persiste el calor y las altas temperaturas, podría quedarse incluso en los 20 millones de hectolitros. Las cooperativas prevén, asimismo, una producción nacional de 41,5 millones de hectolitros, un 6,3 % menos que la pasada campaña.
Europa, que también ha sufrido el calor y las menores precipitaciones, podría tener una producción superior a la del año anterior -que fue de 168 millones de hectolitros-, es decir, en la media de los últimos cinco años, añaden las cooperativas. Mientras tanto, las primeras vendimias españolas -en algunos puntos de las Islas Canarias y de Andalucía- siguen su curso.
Bodegas La Florida se sumaba ayer también y daba por iniciada oficialmente la vendimia en Lanzarote: sus primeras partidas servirán para elaborar vinos blancos secos (Malvasía volcánica).
También arranca la campaña de la uva en la Axarquía malagueña, adelantada por las altas temperaturas, con una reducción del 50 % en la producción prevista debido a que la mayoría de las viñas están quemadas por el excesivo calor de julio, según UPA-Málaga.
Más tiempo queda, por contra, para la vendimia manchega. La cooperativa El Progreso de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) -una de las mayores de Europa, que adhiere además a unos 2.200 agricultores- ya hace prospecciones y estudia si pueden comenzar a vendimiar en la semana del 10 al 15 de agosto o más tarde. Su presidente, Cesáreo Cabrera, apunta que hay "bastante movimiento", en referencia a la buena comercialización de vino, lo que atribuye a que los compradores descuentan que la cosecha será menor a lo esperado por el calor y la sequía y quieren aprovisionarse para evitar posibles subidas de precios posteriores. Esta cooperativa ha realizado estos días transacciones para clientes españoles, italianos, franceses o alemanes, y también han recibido consultas desde Rusia interesándose por sus vinos.
En cuanto a los mercados globales, los expertos del gigante granelero Ciatti afirman en su último informe que las operaciones en el hemisferio sur se mantienen activos, con compradores que están finalizando contratos en América del Sur y Nueva Zelanda. Remarcan que los precios en Sudáfrica para los vinos tintos han ganado atractivo para compradores de Europa y de América del Norte.
En líneas generales -agrega- "el mercado del granel se está moviendo a un ritmo normal para esta época del año", mientras que el comportamiento de los precios dependerá de los mercados financieros y del tamaño real de la próxima cosecha en el hemisferio norte.
Sobre nuestro país, Ciatti comenta que la combinación de altas temperaturas, escasez de precipitaciones en Castilla-La Mancha, una comunidad autónoma muy dependiente del secano y las tormentas de granizo han afectado ligeramente al potencial productivo nacional.
En cuanto a los precios y su evolución en España, los datos oficiales refieren algunas depreciaciones durante los últimos días. Los vinos denominados tradicionalmente como "de mesa" se anotaron bajadas de precios entre el 20 y el 26 de julio, según el último informe de coyuntura que elabora el Ministerio de Agricultura. El vino blanco a granel se dejó un 2,08 % respecto a la semana pasada y se queda en 1,88 euros por hectogrado, mientras que el tinto retrocedió un ligero 0,35 % y se paga a 2,84 euros.
Por mercados representativos, el vino blanco sin indicación geográfica cotiza a salida de bodega a 2,73 euros/hgdo en Albacete; 1,61 en Badajoz; 1,89 en Ciudad Real; 1,94 en Cuenca; 2,76 en Huelva y 2 euros por hectogrado en Toledo, añade asimismo el Ministerio.
Sobre los tintos comunes, también a salida de bodega y granel, el Ministerio muestra cotizaciones de 3,15 euros/hgdo en Albacete; 2,87 en Ciudad Real; 3,02 en Cuenca y Murcia, respectivamente; 2,69 en Badajoz; 2,39 en Toledo y 2,57 en Valencia. Es destacable, entre las novedades legislativas en este sector, que el Consejo de Ministros aprobará hoy dos nuevos Reales Decretos.
El primero, regulará el sistema de autorizaciones de plantaciones -entrará en vigor a partir del 1 de enero del 2016-, mientras que el segundo se refiere a las declaraciones obligatorias en el sector, con una periodicidad mensual a partir de la próxima campaña.
Por otra parte, la Asamblea General de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE) adoptaba ayer dos decisiones trascendentes: de un lado, acordaba solicitar al Gobierno la aprobación de la extensión de norma para los próximos 3 años y, además, aprobaba un modelo de contrato de compraventa de uva, de acuerdo con la Ley de la Cadena Alimentaria.
