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La Comisión Europea (CE) instó a frenar la expansión de la Xylella fastidiosa, una bacteria que está causando la muerte de los olivos en el sur de Italia, aunque aseguró que todavía "no es realista" esperar su erradicación total.

"Entre febrero y noviembre la situación ha empeorado, pues los árboles están mucho más cerca de morir", avisaron fuentes comunitarias después de la visita esta semana a zonas afectadas del comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis. La CE también precisó que el tiempo de vida de un olivo contaminado oscila entre los tres y cinco años.

Aunque la bacteria está presente sobre todo en Apulia (sur de Italia) y de momento afecta al 10 % de los olivos de la región, los expertos temen que se propague por el sur de Europa si no se toman medidas para evitarlo. "La mayor expansión se produce en verano", agregaron.

La Xylella se expande a través de insectos que "extraen la bacteria y luego visitan otras plantas donde la inyectan", explicaron fuentes comunitarias. "Los insectos siguen volando y no podemos pararlos, por lo que la bacteria podría propagarse por otras zonas (...) Nos arriesgamos a tener nuevas infecciones fuera de Italia", alertaron.

Por ello, la CE pidió a los Estados miembros que revisen el estado de sus árboles y solicitó a la Agencia Europea de Salud Alimentaria (AESA) que estudie las medidas adoptadas hasta el momento para reforzarlas. "Existe un riesgo en la Unión Europea y por eso hace falta una regulación", insistieron los expertos comunitarios tras proponer que se delimiten de forma precisa las áreas afectadas.

El objetivo es acabar con la bacteria pero todavía "no es realista esperar una erradicación total", matizaron.

La Xylella fastidiosa ataca principalmente a los olivos, que muestran hojas abrasadas, ramas desecadas y síntomas de rápido deterioro que, en los casos más graves, llevan a la muerte del árbol. Italia es el segundo productor comunitario de aceite, después de España.