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La Confederación Española de Pesca (Cepesca) ha criticado, en la Eurocámara, los problemas que tiene la flota en la aplicación de la reforma pesquera comunitaria, respecto a la prohibición del descarte de peces y a las obligaciones de descargar todas las capturas del barco en puerto.

El vicepresidente de Cepesca, Juan Manuel Liria, ha participado en una audiencia celebrada en la comisión de Pesca del Parlamento Europeo sobre las medidas para aplicar el veto a los descartes -capturas no deseadas de peces que después, muertos, son arrojados al mar-. Dicha prohibición es uno de los puntos centrales de la reforma de la Política Pesquera Comunitaria (PPC) y consiste en imponer que los pescadores desembarquen obligatoriamente todas sus capturas en puerto; entrará en vigor en 2015 para especies como la caballa o el jurel.

Liria ha considerado que, en general, las reglas de la Unión Europea (UE) son difíciles de cumplir e interpretar, a lo que se suman las medidas técnicas, que "no son compatibles" con la nueva PPC. En su ponencia, ha apuntado que la UE lleva 20 años de retraso a la hora de aplicar políticas que eviten el descarte de pescado, en comparación con otras potencias pesqueras y que uno de los principales problemas en el ámbito comunitario es la necesidad de adaptar las cuotas a las capturas. Ha añadido que las nuevas obligaciones son un gran reto para la flota de la UE y que existen muchas dudas sobre si podrían cumplirse, además de criticar las propuestas técnicas por su ambigüedad. Por este motivo, Cepesca ha solicitado que se otorgue mayor prioridad a una buena aplicación que a la urgencia.

El representante de los armadores ha pedido, además, que se establezcan planes regionales y que los controles se impongan de forma progresiva, con mayor flexibilidad durante los primeros años de aplicación, para ganar la comprensión de los pescadores.