La nueva normativa mejorará la coherencia y claridad de estos esquemas, al agrupar en una sola política todos los aspectos.
Los países de la Unión Europea apoyaron los cambios en las normas y protección de alimentos con distintivos
de calidad, entre los que destacan las denominaciones de origen (DOP) o
Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP).
El Comité de
Gestión de la UE -formado por expertos de los Veintisiete- respaldó el
acuerdo, al que la semana pasada llegaron en una reunión representantes
del Consejo, el Parlamento Europeo y la Comisión Europea, informaron
fuentes comunitarias.
La nueva normativa mejorará la
coherencia y claridad de estos esquemas, al agrupar en una sola política
todos los aspectos de los regímenes de certificados de alimentos, ahora
dispersos en muchas regulaciones.
Asimismo, establecerá "un
nuevo marco" para la creación de expresiones voluntarias, una
herramienta que se ofrece a los agricultores o ganaderos que quieran dar
a conocer las especificidades de sus productos.
Para su
aprobación definitiva, la normativa necesitará el respaldo formal del
pleno de la Eurocámara, que lo votará en julio o septiembre.
Sobre todo, el nuevo régimen afecta a los productos de calidad con
Denominación, IGP o Especialidades Tradicionales Garantizadas (ETG).
En la UE, un millar de alimentos con esos tipos de enseñas están
incluidos en un registro europeo, lo que significa que cuentan con
protección comunitaria, y de ellos unos 140 son españoles.
Entre los españoles, son conocidos fuera de las fronteras comunitarias,
por ejemplo, el turrón de Alicante, el queso Manchego o la ETG jamón
Serrano.
Sobre las ETG, el nuevo esquema establece que los
productos con nombres similares pero producidos a través de distintas
tradiciones podrán registrarse y la definición de "tradicional" pasará a
significar un uso probado en el mercado durante al menos 30 años (en
lugar de los actuales 25).
España es el tercer país que más productos con DOP o IGP tiene reconocidos por la UE, por detrás de Italia y de Francia.