Las organizaciones ecologistas son las que han levantado la voz de alarma.
Las organizaciones ecologistas
advierten que el retraso en el diseño y aprobación del Plan de
Ordenación de la Corona Forestal de Doñana -que implica la
ordenación de la zona fresera- va a provocar "serios perjuicios no
sólo al espacio natural de Doñana, sino a la propia comarca y sus
agricultores".
El portavoz de Ecologistas en Acción en
Doñana, Juan Romero, ha urgido a la Junta de Andalucía a que "ponga
sobre la mesa de una vez por todas" dicho plan al que se comprometió
"hace ya dos años sin que hasta el momento se conozca".
Se trata, ha apuntado, "de un documento que corre prisa para
evitar que se sigan produciendo transformaciones de terrenos
forestales en agrícolas y extracciones ilegales que, por otra parte,
no deberían de permitirse desde la aprobación del Plan de Ordenación
del Territorio del Ámbito de Doñana [1](POTAD)".
Por ello, ha apuntado que tanto desde Ecologistas en Acción como
desde WWF se exige a la administración andaluza a que apremie en la
redacción del documento pues "su inexistencia está perjudicando a
agricultores legales".
Y es que el hecho de que esta zona no esté ordenada y de que se
sigan ocupando montes forestales para uso agrícola con las
consiguientes extracciones ilegales supone "más sobreexplotación del
acuífero 27, que es el que surte de agua a Doñana, con el
consiguiente perjuicio para la flora y la fauna".
Romero ha insistido en que la corona forestal pendiente de
ordenación forma parte de los espacios protegidos por la Unión
Europea, por el POTAD y por la ley forestal, por ello, al margen de
la redacción o no del plan de ordenación, ha exigido a la
administración que actúe para evitar más transformaciones de suelo.